Desbrave y Doma

Establecer un buen plan de trabajo en el desbrave de los caballos jóvenes es fundamental así el Centro Ecuestre Finca Abrigosa, dispone de un equipo de profesionales que guiarán al caballo desde su primer contacto con las personas y una cabezada hasta el momento de  orientar su trabajo diario a cualquier tipo de disciplina dependiendo de las características de cada uno de ellos.

Cuando se trabaja con caballos jóvenes es primordial hacerlo respetando sus tiempos de aprendizaje, el peor error que se puede cometer es no dedicarle el suficiente tiempo, la doma es un trabajo diario.

En un primer momento se trabaja con el fin de acostumbrar al potro a las personas, para que surjan relaciones de confianza y así el trabajo posterior sea  más positivo. Una vez superada ese primer momento  y tras un tiempo trabajando pie a tierra, se pasará al trabajo montado en el que se seguirá en todo momento la llamada escala de adiestramiento que consta de tres fases con dos escalones en cada fase, es importante no pasar a una fase sin haber adquirido bien los conocimientos de la anterior, de ahí la importancia de no tener prisa.

Fase 1

En esta primera fase se trabajará el ritmo y la soltura, de forma que el caballo trabaje con un ritmo regular en los tres aires, sin ofrecer resistencia a las ayudas del jinete.

Fase 2

El objetivo es la búsqueda de un buen contacto, suave entre la boca del caballo y la mano del jinete al mismo tiempo que el  impulso de los posteriores, a través de un dorso flexible.

Fase 3

Ya en esta fase, el trabajo se centrará en el trabajo de rectitud y reunión.

Una vez que el caballo va bien montado y acepta el trabajo, esto se complementará con salidas al campo, para que pueda adaptarse a las diferentes situaciones y a los sonidos de la naturaleza, viento, pájaros, …

Por otro lado si ya tienes un caballo domado, pero quieres mejorar su forma física también podremos hacerlo, estableciendo un plan de trabajo acorde a sus necesidades.